El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, Silvio José Báez Ortega, en este cuarto domingo de Adviento, señaló que los regímenes encarcelan a los obispos e impiden la libertad religiosa porque tienen miedo a la Iglesia y por eso llamó a los feligreses a no tener miedo.
Báez dijo que el “arma preferida” de los regímenes totalitarios silencian y someten a los pueblos.
El anuncio de Báez se da en un contexto en que la dictadura de Nicaragua capturó el pasado 20 de diciembre al obispo de Siuna, monseñor Isidoro del Carmen Mora Ortega y apresó por segunda ocasión a monseñor Óscar Escoto, vicario general de la Diócesis de Matagalpa.
Mora Ortega es el segundo obispo encarcelado. En febrero pasado la dictadura de Nicaragua condenó a 26 años de cárcel a monseñor Rolando Álvarez, quien se encuentra preso en la cárcel La Modelo.
“No dudemos que son ellos, los poderosos, los dictadores y opresores quienes tienen miedo. ¿Por qué persiguen a los cristianos, encarcelan a los obispos e impiden la libertad religiosa? Porque le tienen miedo a la Iglesia, al poder liberador del Evangelio, a la luz de la verdad de Jesús y a la fuerza de la oración”, reflexionó Báez, durante su homilía en la iglesia Santa Agatha en Miami.
Agregó que los dictadores saben que el pueblo “ama a la Iglesia y a sus pastores”. El régimen de los Ortega-Murillo ha prohibido en Nicaragua las procesiones religiosas, encarcela a los religiosos, ha impedido de ingresar a sacerdotes y ha expulsado a religiosas.
“Por eso le tienen miedo también al pueblo que sostenido por su fe sigue soñando y lucha por su liberación. Los tiranos tienen razones para tener miedo”, manifestó Báez.
Agregó que los “regímenes totalitarios podrán seguir mostrando su desprecio por los derechos humanos, su flagrante falta de respeto por la libertad religiosa y su profundo odio hacia la Iglesia”.
“Pero morirán en su pecado y pasarán un día olvidados y condenados por Dios y por la historia. Prevalecerá para siempre la verdad, el bien, la bondad y la ternura que han entrado en la historia a través del hijo de María, Jesús”.